El área trata sobre la formación, información y el asesoramiento específico que el Equipo realiza a la comunidad educativa, no sólo como tarea propia sino como una característica fundamental de la intervención. El ejercicio del asesoramiento hace posible que la atención para nuestra población sea individual y, por tanto, más eficaz.

El asesoramiento no es únicamente una actividad puntual para responder a una necesidad en un momento determinado. Es también una relación permanente y continua entre la comunidad educativa y el coordinador de caso, en la que ambas partes comparten la información necesaria para que el desenvolvimiento del alumno sea lo más normalizado posible.

Se recoge información del alumno en aspectos que tienen que ver con la etapa y el nivel educativo que cursa, con su competencia curricular y con las adaptaciones curriculares de que dispone.

Se entiende por currículo, el conjunto de objetivos, contenidos, métodos pedagógicos y criterios de evaluación de cada uno de los niveles, etapas, ciclos, grados y modalidades del sistema educativo.

Se entiende por adaptaciones curriculares cualquier ajuste o modificación que se realice en el currículo a fin de adecuar éste a las necesidades y características del alumno.

En este área se contemplan los aspectos específicos referidos al proceso de adquisición de las técnicas instrumentales básicas tanto en tinta como en braille a lo largo de la vida educativa de los alumnos.

La estimulación visual, es una intervención específica cuya finalidad es conseguir el desarrollo de las funciones visuales.

El objetivo de la intervención en estimulación visual es el desarrollo del aprendizaje sensorial visual y, a través de él, de la habilidad cognitiva. Ésta habilidad (conocimiento y pensamiento) implica el uso sensorial. La información que llega a través de los sentidos es recibida, interpretada, combinada y conservada en el cerebro.

En esta área se realiza básicamente seguimiento del proceso de crecimiento y desarrollo del  niño con ceguera o deficiencia visual en el periodo 0-6 años. Contempla la evolución general, poniendo énfasis en lo específico del desarrollo en la población con discapacidad visual.

En esta etapa se ha de considerar al niño en su globalidad, teniendo en cuenta los aspectos intrapersonales (biológicos, psicosociales y educativos) propios de cada individuo y los interpersonales,  relacionados con su propio entorno, familia, escuela, cultura y contexto social.

Todos  los alumnos con discapacidad visual, de la Comunidad Autónoma de La Rioja están escolarizados en colegios ordinarios, en su pueblo, barrio o ciudad, siguiendo el currículo oficial, y reciben una atención que responde a las necesidades educativas específicas derivadas de su situación visual.

Las maestras de apoyo, trabajamos para conseguir que los recursos educativos sean accesibles a todos los alumnos, tanto niños como adultos,  independientemente de sus características:  ceguera total, discapacidad visual, deficiencias asociadas a la visual, sordoceguera…. Se dispone también de recursos educativos, técnicas y materiales adaptados a las necesidades de las personas con problemas visuales  que facilitan el proceso educativo.